La salvación se origina en la gracia de Dios. El plan de salvación de Dios procede de su corazón para encontrar su cumplimiento en las vidas de los pecadores. Dios no estaba obligado a salvar al hombredel pecado y a dar además sus bendiciones espirituales. Los pecadores no merecen ser salvados; ellos son merecedores de muerte . Dios pudo haber destruido toda la raza humana y los pecadores hubieran recibido lo que merecen . Cuando los pecadores son salvos y reciben bendiciones de salvación , entonces, ellos reciben lo que no merecen por si mismos. La salvación es inmerecida por parte de la humanidad. Es un don de Dios.( Rom.3:24; 5:15-21; 6:23; Ef.2:8; Isa.55:1,2; Apoc. 22:17 ). La causa que motiva la gracia de Dios se apoya totalmente dentro de Él mismo. No hay nada dentro del pecador cuando recibe la gracia de Dios, que merezca su don dee salvación. La gracia es libremente dada por el amor de Dios en relación a las necesidades del hombre, en su estado de pecado y delito
I La salvación no es por obras
La gracia y el mérito se excluyen mutuamente. Ellos no pueden coexistir; uno elimina al otro. Las obras ejecutadas por el pecador no pueden ser la base de la salvación. El hombre no puede ganar ni merecer salvación. La bondad natural del hombre no tiene meritos a la vista de Dios. Todas nuestra justicias como trapo de inmundicia".( Isa.64:6) La justicia hecha por manon del hombre es egoísmo y lo que produce son obras de la carne. Todos los hombres son pecadores, y todo lo del hombre es pecaminoso. El hombre no puede salvarse a sí mismo.
Los pecadores no pueden obtener salvación guardando la ley del antiguo testamento. La rectitud que acepta Dios, no puede ser adquirida guardando esta ley. Esta ley fue dada a Israel para definir y revelar el pecado.(Rom.3:19,20; 7:7). No fue destinada a ser el medio por el cual el hombre puede ser salvo y ganar la vida eterna. ( Gal.3:21; Rom.8:3 ). Fue destinado a mostrar al hombre su necesidad del salvador.(Gal.3:24). La entrada del pecado vino por medio de Adan; el conocimiento del pecado vino através de Moisés; la remisión de pecado vino por medio de Jesús.
Por medio de la muerte de Cristo, los creyentes no están ya bajo esa ley. (Rom.7:4; Ef.2:14,15; Col.2:14-20), sino bajo la gracia (Rom.6:14; 7:6; Gal.4:30,31; 5:18) . Los cristianos están prevenidos a: "Estad firmes en la libertad con que Cristo nos hizo libres, y no estéis otra vez sujetos al yugo de esclavitud" (Gal.5:1)
Pablo declaró: De Cristo os desligasteis, los que por la ley os justificáis; de la gracia habéis caído"(Gal 5:4) y "No desecho la la gracia de Dios; pues si por la ley fuese la justicia, entonces por demás murió Cristo" (Gal.2:21)
La diferencia básica entre el cristianismo y todas las demás religiones (incluyendo la formas pervertidas del cristianismo) , es que la religiones no cristianas son religiones de ley, mientras que el cristianismo es una religión de gracia. Las religiones no cristianas están caracterizadas porlos esfuerzos del hombre por agradar a la deidad, por medio de sus propias obras (ejercicios morales, buenas obras, prácticas ascéticas, oraciones peregrinaciones, sacrificios, etc). La religión cristiana , al contrario, se caracteriza por la humilde respuesta del hombre a lo que Dios ha hecho, está haciendo y hará por él.
Si la salvación pudiera ser ganada por el hombre, dejaría de ser un dón. La vida eterna será el pago de Dios de una deuda al hombre. "Pero al que obra , no se le cuenta el salario como gracia , sino como deuda " (Rom.4:4). Pablo razonó: "Y si por gracia , ya no es por obras; de otra manera la gracia ya no es gracia. Y si por obras, ya no es gracia: de otra manera la obra ya no es obra" (Rom.11:6). Si el hombre pudiera ganar aunque sea una parte de la vida eterna, la salvación dejaría de ser un dón.
Si la salvación estuviera basada sobre las obras humanas, el hombre podría jactarse de su hazaña. En el reino, el hombre podría palmearse el mismo la espalda y orgullosamente anunciar: Yo estoy aquí por lo que hice". soy digno de recibir alabanza y gloria porque yo acumulé suficientes méritos por medio de mis propias obras para merecer la vida eterna".
El orgullo , entonces, es pecado, y los pecadores serán excluidosdel reino eterno de Dios. Pablo explicó:" Porque por gracias sois salvos por medio de la fe; y esto no de vosotros, pues es dón de Dios; no por obras, para que nadie se glorie. Porque somos hechura suya,creados en Cristo Jesús para buenas obras"(Ef.2:8-10). "¿donde pues esta la jactancia? Queda excluida" (Rom.3:27).El plan de salvación de Dios por medio de la gracia que produce verdadera humildad dentro del hombre. En respuesta a la gracia de Dios, el pecador viene a Dios exactamente como él es, sin rogar que El acepte sus méritos. El reconoce que no merece la salvación, que no merece otra cosa que destrucción. Para recibir el dón de Dios, es menester que el pecador venga a Dios con las manos vacias. El puede decir: " No traigo nada en mi mano,simplemente a tu cruz yo me adhiero". Una persona no puede adherirse al Cristo de la cruz, si sus manos están llenas con trabajos de sí misma. Las manos con propia jactancia no tienen lugar para recibir la justicia que es de Dios.
Muchos pecadores rechazan la oferta de salvación de Dios porque ellos son orgullosos para aceptar un dón. Por orgullo, ellos aseguran su propia suficiencia y su independencia de Dios. Ellos se jactan de que no necesitan ayuda, que pueden estar sobre sus propios pies, y pueden cuidarse de sí mismos. Insisten en que ellos pueden pelear sus propias batallas y que nunca piden nadie ninguna cosa. Ellos desean ser dejados solos para vivir sus propias vidas sin ninguna interferencia de Dios. Si Dios puede permitirles comprar vida eterna de algún modo, ellos podrían gratamente aceptar la oferta de Dios. Ya que Dios insiste en que la salvación es enteramente un dón, los pecadores orgullosos no quieren nada con el evangelio. Jesús indicó que el orgullo es la barrera mayor para la conversión:
"De cierto os digo, que si no os volveís y os haceís como niños, no entrareís al reino de los cielos" (Mat.18:3).
La salvación no es por obras , para que ningún hombre pueda jactarse; es toda de gracia , para que el hombre glorifique eternamente a Dios. La conversión no merece salvación . Arrepentimiento , fe y bautismo no son el origen ni la base de la salvación . Por medio de ellos, una persona no acumula mérito pa ra ganar la vida etrna. El pecador es salvo por medio del arrepentimiento, la fe y el bautismo porque estos requisitos deben cumplirse antes que él pueda aceptar el dón de salvación de Dios. la gracia de Dios es el origen de la salvación y el sacrificio de Cristo, es la base de la salvación. La conversión es la causa instrumental o condición para la salvación , pero no es la base que amerite la salvación .
El hombre tiene responsabilidad al aceptar el dón de Dios, pero Dios recibe toda la gloria otorgando este dón. Aún despues que los pecadores han aceptado el dón de salvación de Dios , y aún después de que ellos permiten a Jesús producir los frutos del espíritu en sus vidas , ellos no tienen razón para envanecerse; no tienen base para jactarse. Despues que han sido llenos todos los requisitos de Dios, los humildes pecadores reconocerán que son solamente "siervos inútiles"(Lu.17:10). Cada pecador salvado en el reino futuro de Dios , será una ilustración de la obra de la gracia de Dios. (Ef.2:7). Aunque inmortal y coheredero con Cristo, el creyente glorificado será un testimonio de la gracia de Dios. El dirá: "Yo estoy aquí en la eternidad perfecta de Dios, aunque no merezco estar aquí. Yo merezco destrucción , yo he experimentado la gracia de Dios y el sacrificio sustituto de Cristo". El será solo un pecador salvado por gracia.
II. LA BUSQUEDA DE DIOS POR EL HOMBRE.
La busca del hombre por Dios es solamente la respuesta a la busca de Dios por el hombre. Dios busca al pecador hasta que el pecador lo encuentra . El encuentro de Dios por el pecador es justamente la respuesta al encuentro del pecador por Dios. La salvación en el nuevo testamento muestra a Dios y a Jesús buscando al hombre. Jesús dijo: 2porque el hijo del hombre vino a buscar y a salvar que se había perdido"(Luc.19:10). El habló acerca del pastor que buscó la oveja perdida, de la mujer que revolvió su casa para encontrar la moneda perdida,y del hijo prodigo que dejó su condición perdida y retornó al hogar. El pecador debe tomar un lugar al pie de la cruz para que Dios en su gracia , pueda encontrarlo.